Forgive One Another as God has Forgiven Us
In today’s reading Peter asks Jesus how many times one ought to extend forgiveness to another. The
parable of the unforgiving servant is Jesus’ elaboration of his initial reply to Peter. Through the parable we
come to understand the depths of God’s mercy toward us and the results of our acceptance of God’s forgiveness. There is a temptation to quantify forgiveness as Peter tried to do, but Jesus’ point is that forgiveness is not about quantity—the number of times we extend forgiveness to another. In the parable the king’s forgiveness is like God’s forgiveness, and it transforms us, helping us to be as forgiving as God.
The lesson is clear: If we hoard God’s mercy while showing no mercy to others, we risk forfeiting the effects of God’s mercy in our lives.
Perdonémonos Unos a Otros como Dios nos ha Perdonado
En la lectura de hoy Pedro le pregunta a Jesús cuántas veces se debe perdonar al que nos ha ofendido. La parábola del siervo que no perdona es la elaboración de Jesús de su respuesta inicial a Pedro. A través de la parábola llegamos a comprender la profundidad de la misericordia de Dios hacia nosotros y los resultados de nuestra aceptación del perdón de Dios. Existe la tentación de cuantificar el perdón, como intentó hacerlo Pedro, pero lo que Jesús quiere decir es que el perdón no se trata de cantidad: el número de veces que extendemos el perdón a otro. En la parábola, el perdón del rey es como el perdón de Dios y nos transforma, ayudándonos a ser tan indulgentes como Dios. La lección es clara: si atesoramos la misericordia de Dios sin mostrar misericordia a los demás, corremos el riesgo de perder los efectos de la misericordia de Dios en nuestras
vidas.