Jesus Became the Humble Servant
In today’s readings from Leviticus and the gospel of Mark, we see stories of lepers. The Leviticus passage refers to lepers as “unclean” and the Mark passage talks about Jesus healing a leper. The passage shows that Jesus is compassionate: as people cry out to Jesus, he shows mercy, and does not delay. After Jesus shows mercy and heals the leper, Jesus warns him not to tell anyone: “See that you tell no one anything, but go, show yourself to the priest and offer for your cleansing what Moses prescribed; that will be proof for them.” Nonetheless, the leper decides to tell everyone. In certain ways, this healing story points us towards Jesus’ future. Jesus came into the world to show us mercy, heal us, comfort us, and give us life. Jesus became the humble servant, not the warrior messiah many expected would come to overthrow the Roman Empire. Jesus took the lonely road of giving up his life for us. He became alone, abandoned, and isolated on Golgotha. And he took that path to show us grace, provide healing, and give us eternal life. www.uscatholic.org
Jesús se Convirtió en el Siervo Humilde.
En las lecturas de hoy del Levítico y el evangelio de Marcos, vemos historias de leprosos. El pasaje de Levítico se refiere a los leprosos como “inmundos” y el pasaje de Marcos habla de Jesús sanando a un leproso. El pasaje muestra que Jesús es compasivo: cuando la gente clama a el, Jesús muestra misericordia y no se demora. Después de que Jesús muestra misericordia y sana al leproso, Jesús le advierte que no se lo diga a nadie: “Mira, no digas nada a nadie, sino ve, muéstrate al sacerdote y ofrece por tu limpieza lo que prescribió Moisés; eso será una prueba para ellos”. Sin embargo, el leproso decide contárselo a todos. En cierto modo, esta historia de curación nos señala el futuro de Jesús. Jesús vino al mundo para mostrarnos misericordia, sanarnos, consolarnos y darnos vida. Jesús se convirtió en el siervo humilde, no en el mesías guerrero que muchos esperaban que vendría a derrocar al Imperio Romano. Jesús tomó el camino solitario de dar su vida por nosotros. Quedó solo, abandonado y aislado en el Gólgota. Y tomó ese camino para mostrarnos gracia, brindarnos sanidad y darnos vida eterna. www.uscatholic.org